qué tipos de calefacción existen

¿Qué tipos de calefacción existen?

Cada sistema de calefacción para el hogar tiene unas características diferentes y no solo por el modo en que obtiene la energía para proporcionar calor. Algunos tienen ventajas añadidas como mayor comodidad o un gasto energético menor. Por eso, para una buena elección, es importante conocer qué tipos de calefacción existen y sus particularidades más relevantes.

Qué tipos de calefacción existen: los 10 más populares

La variedad de tipos de calefacción existentes es tan grande que por eso vamos a diferenciarlas según el suministro o fuente de energía y su modo de funcionamiento.

1. Sistema de aerotermia, la calefacción sostenible e inagotable

¿Te imaginas una tecnología que permita extraer del aire que rodea a una casa la energía térmica y convertirla en calor para proporcionar mayor confort térmico en el hogar? No tienes que imaginarlo, ya existe. Es la aerotermia, un tipo de calefacción sostenible que se alimenta de un suministro inagotable que no tiene coste monetario. Además, puede proporcionar refrigeración en verano y agua caliente sanitaria.

El coste de adquisición se rentabiliza rápidamente, especialmente en viviendas grandes y consume una cantidad muy reducida de electricidad para el funcionamiento del sistema de aerotermia. Es por eso que gracias a sus ventajas la estamos instalando en las casas en Majadahonda de obra nueva con afar4.com.

2. Bomba geotérmica, el calor que procede del interior de la tierra

Si te preguntas qué tipos de calefacción existen, la bomba geotérmica es uno que quizá no conozcas. Obtiene suministro del calor del subsuelo y lo convierte en energía calorífica para calentar estancias.

Aunque suene exótico no necesitas vivir junto a las faldas de un volcán para aprovecharlo. Está disponible en cualquier lugar del mundo. Como la anterior, además de calor puede generar refrigeración y agua caliente sanitaria.

3. Biomasa, un tipo de calefacción cada vez más popular

La biomasa para calefacción ha ganado en popularidad en los últimos años. Especialmente las estufas de pellet. Pero debes tener en cuenta que aunque renovable también existe combustión, es necesario disponer de chimenea e implica ocuparse de su limpieza a diario. Además, necesitas espacio para almacenar el combustible.

4. Calefacción eléctrica, un modelo bien conocido

La calefacción eléctrica ha sido durante mucho tiempo una de las más empleadas, pero los altos costes de la electricidad la están relegando de su lugar preferente. No obstante, no está de más tener en cuenta que también se puede obtener electricidad por medios más sostenibles y asequibles, como a través de la energía fotovoltaica de autoconsumo.

Existe una gran variedad de tipos de calefacción eléctrica; estufas o radiadores de aceite, de aire caliente, de infrarrojos, radiadores…

5. La calefacción de gas

En las actuales circunstancias geopolíticas la calefacción de gas no es la más interesante. En estos momentos es un suministro caro y existe un potencial riesgo de desabastecimiento en un futuro relativamente cercano. No obstante la mencionamos porque si te preguntas qué tipos de calefacción existen, es uno que se ha usado mucho en viviendas en las últimas décadas.

6. Calefacción de gasóleo

La caldera que se alimenta de gasóleo para calentar el agua de los radiadores y emitir calor a la vivienda en un tipo de calefacción de sobra conocido. Pero su popularidad y uso se ha ido reduciendo por ser contaminante y por los elevados precios de un suministro procedente de fuentes fósiles.

7. Parafina

No se utiliza mucho pero aún existen estufas de parafina que imitan a una chimenea tradicional. No es barato y hay que tener en cuenta el olor, que puede llegar a ser muy molesto, por lo tanto es muy raro que te encuentres con este modelo.

8. Queroseno, un tipo de calefacción con un olor fuerte

Aún más fuerte es el olor genera el queroseno al quemarse. Por ello es un tipo de calefacción poco interesante en espacios domésticos aunque aún se usa en talleres y otros negocios.

9. Bombas de calor

La bomba de calor es un sistema de bajo consumo. Su rendimiento es muy bueno porque produce hasta 5 veces más calor del que consume para su funcionamiento. Su funcionamiento se basa en la termodinámica y obtiene calor del agua, el aire (bomba aerotérmica ya nombrada) o la tierra (bomba geotérmica también mencionada).

10. Suelo radiante

Puede funcionar con electricidad, con gasoil y con otros suministros energéticos. Ofrece un muy buen rendimiento y la uniformidad de la distribución de la temperatura a lo largo de toda la vivienda es muy buena.